
La mandíbula humana se conecta al cráneo mediante dos articulaciones temporomandibulares. Las superficies de estas articulaciones son altamente incongruentes, lo que ocasiona una gran movilidad del cóndilo mandibular con respecto al cráneo. Entre las superficies articulares se sitúa el disco que disminuye la presión de contacto e incrementa el área de contacto entre las superficies […]
Leer más...